ADIBERGEN

ELENGOA
Según consta en los Anale Belei o «Anales de los Bere», El Elengoa fue la lengua hablada por nuestros antepasados en épocas remotas y traída de los Cielos por estos. Se desprende por la obra de Eleazar que, de ésta, se originaron otras formas dando resultado a un amplio espectro de variaciones. Pero en el origen, ¿Qué hubo antes de la lengua? Contaban en los antiguos tiempos que antes de que el hombre y la mujer existieran, los Padres Aitanos (llamados también Dioses Aitanos), se agitaban deseosos de tener un cuerpo; la materia la ansiaban. Su vida, que se extendía durante cientos de años terrestres, carecía de lo que ellos podían ver y oír a distancia, así mismo hablar sin soporte físico, pero capaces de mover las partículas, vibrar. Un canto imperceptible para el oído, pero no para la inteligencia.
"Aparecieron los humanos que se autodenominaron mucho más tarde los EDU o sea los “propietarios”, los cuales crearon una lengua o lenguaje, empleando como primeras vocales los sonidos “AI”, "O", "I”, “U”, “E”. Conozco el desarrollo de esta lengua...” (A. Eleazar)
Al estudio e investigación del origen, desarrollo y extensión de esta lengua celeste descubierta por el historiógrafo Alexandre Eleazar y que denominó Elengoa, "la Lengua Celeste o de Dios", dedicaremos exclusivamente esta sección.
Efectivamente, y basándonos en las tesis de A. Eleazar, el lenguaje Elengoa tiene un origen celestial, proviniendo en su máxima pureza del EDUEN, la lengua hablada en Baleden y en todos los OROZKAR o en la totalidad de las tierras del Cielo. Así pues, el Elengoa sería una adaptación terrestre del Eduen. El euskera, hablado en la actualidad por unas 700.000 personas conserva aún un 80% aprox. de las raíces de la lengua única y original.
Imanol Mujika Alberdi en su Lingüística vasca comenta sobre el vasco: «El idioma fue deducido de la naturaleza como todas las cosas, pues el ser humano, al constituirse como animal consciente, hace consciencia de algo que ya fue creado con anterioridad. Así, el arte es, en un principio, imitador de las formas naturales, pero hoy se quiere pintar la idea o el alma de las cosas que viene a ser la esencia que forma e integra a la idea. Todo en la naturaleza sigue el proceso de desarrollo de la ciencia, ya que sus conocimientos son un derivado de las leyes naturales, y por ello, la formación de los idiomas es idéntica, y obedece al siguiente hecho: Cada ser o ente, constituido como individual, posee un campo magnético y una vibración determinada, que da un sonido o nota determinada, y también, un color. El origen de las lenguas es el intento humano de reproducir ese sonido vibratorio natural».
«En el estudio de la historia «etimológica» de todas las palabras de las lenguas se obvia un asunto importante. Siempre se ha separado la definición de la «raíz» con el porqué de su existencia (de eso último poco o nada se ha hablado). Ninguna palabra podría existir sin una solución histórica y cultural (por utilizar una palabra moderna, aunque quizás no la más adecuada aquí), sin su contexto. Serían recursos parciales y posiblemente erróneos y pongo como ejemplo el consenso de que casi todas las palabras de lenguas románicas proceden del latín y hasta del griego, como si antes las otras lenguas no hubiesen existido. De hecho, el origen del castellano como procedente del latín constituye todo un fraude, aunque de eso muchos se dieron cuenta antes, por supuesto. Que no se rasguen pues las vestiduras aquellos que sólo contemplan como fundamento del castellano la lengua latina porque creo que hemos olvidado demasiadas cosas sobre nuestros orígenes ibéricos ancestrales». (Serdaniol).
BIALDU ZAR BE
IZEKI ZEARO ANALE BELEI
Enviado ZAR BE
Haz de luz para siempre en los anales de los Bere
*Grabado por Luis Alberto Hernández Rangel
